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Entregame tu corazon
William era el hombre perfecto, al menos lo era para su amiga y Kristine estaba convencida a hacer cualquier cosa con tal de que empiecen a salir pero ?que ocurriria si ella comienza a enamorarse de el?
2019 LITERATURA Y FICCION ROMANTICA
No me gusta. Kristine puso los ojos en blanco y dio un sorbito de su zumo natural de aguacate y naranja mirando distraida al hombre que estaba discutiendo con lo que le parecia un mecanico sobre algo de la carroceria de su deportivo rojo. --Parece rico --insistio, apartando la mirada del desconocido de pelo rubio y corto, espalda ancha y culo respingon--. Y tiene buen culo. Anabel le lanzo un rapido vistazo al hombre antes de girar el cuello hacia ella con una sonrisa displicente. --?Por que crees que es rico? Kristine parpadeo y clavo la mirada en los ojos azules de su amiga. --Por el coche. --?Y si es de empresa? --?Desde cuando te da un coche asi la empresa? Las dos se miraron fijamente y finalmente Anabel se encogio de hombros, doblando el periodico que habia estado leyendo hasta hacia un momento. --No todas son nuestra empresa. --No lo dudo. Dificilmente podrian hacer mucho la competencia en mediocridad a la empresa de catering en la que trabajaban desde hacia cinco anos, los mismos que llevaba fuera de la universidad. --Tambien tendria que ver el puesto de trabajo... --!Aja! --le interrumpio Kristine senalandola indecorosamente con un dedo --. Lo que admites que si tiene un buen puesto de trabajo por el que se le ofrece ese cochazo de empresa, tiene que ganar una pasta. --Eso no implica que sea rico. --Pero si que tiene un buen sueldo.
--Vale, aceptemos que tiene un buen sueldo --Anabel puso los codos sobre la mesa y le dedico una media sonrisa condescendiente--. ?Crees que eso lo es todo para ser una buena pareja? Kristine dudo un segundo antes de responder pero cuando lo hizo tambien sonrio. --Vale, no, pero tendras que admitir que el dinero ayuda mucho en una relacion. Su amiga sonrio y sacudio la cabeza pero termino apoyando la espalda en el respaldo de la silla. --Al menos no es importante para mi. --Vale, da igual que tenga dinero pero miralo. Esta vez senalo con las manos al chico a traves de los cristales y miro significativamente a su amiga. Anabel volvio a girar la cara para mirar la espalda del hombre que seguia discutiendo y senalando efusivamente algo insignificante en un lateral de la puerta del coche. Hasta Kristine pudo ver la manera casi imperceptible en la que Anabel enarco una ceja antes de volver a girar el cuello hacia ella. --Si, tiene una espalda llamativa. --Y un culo bonito. --Si --acepto su amiga moviendo los dedos por la taza--, y un culo bonito. Y se hizo un silencio que para Kristine parecio interminable mientras veia como la apatia de Anabel volvia a tenir su expresion. --!Eh! --estallo--. ?Y ya esta? --?Ya esta sobre que? --!El hombre! ?Que te parece? --?Que quieres que te diga? Anabel se encogio de hombros y Kristine respiro con fuerza.
--Tu impresion, Anabel, ?te gusta o no? --Solo veo su espalda... y su culo --anadio con una irritante sonrisilla--. Puede que sea un monstruo. --El fisico es lo que menos importa. Ademas tiene buen cuerpo independientemente de su espalda y su culo. Miralo. Esta vez Anabel no giro la cabeza hacia los cristales; se llevo la taza a los labios y mantuvo la sonrisa. --Si, pero sigo sin verle la cara. --!Oh, vamos! --Y antes de que continues, es verdad que su aspecto no es algo importante pero solo tengo que ver como actua por un estupido coche para saber que su personalidad da asco. Kristine ladeo la cabeza para anotar un punto a la observacion de su amiga. En ese aspecto el chico fracasaba estrepitosamente como candidato a futuro novio para Anabel. --Pero... --Tampoco tengo que salir para saber que es un chulo, demasiado pagado de si mismo y posiblemente un despota que opina que cualquier persona un rango inferior a el existe unicamente para servirle. Kristine miro a su amiga alucinada, incapaz de llevarse el vaso a los labios y vio como Anabel daba otro sorbo a su cafe sin mirar nada en realidad. --?En serio? --logro decir solo por el placer de oir su propia voz o ya puestos unicamente por decir algo, una chiquillada por ser la ultima en hablar. --Ademas --siguio su amiga como si no la hubiera escuchado--, esta casado. Kristine giro el cuello mecanicamente para mirar la escena cada vez mas grotesca del hombre casi escupiendo mientras le gritaba al otro que trataba de razonar con el.
--?Como lo sabes? --pregunto al final intrigada. --Por el anillo. --?Anillo? --Kristine casi pego la frente en el cristal para ver mas de cerca la mano que el hombre no dejaba de mover efusivamente frente a la cara del otro y de varias personas que se habian detenido alrededor con curiosidad--, ?de verdad distingues algo? !Era increible la capacidad que tenia la mirada de Anabel! Kristine se dio cuenta que habia apoyado las palmas de las manos en el cristal cuando su amiga carraspeo disimuladamente al acercarse una de las camareras y se aparto avergonzada. --Obviamente no --admitio. --?Entonces? Kristine entrecerro los ojos agarrando con fuerza el zumo ya olvidado. --Es el capullo del que hablabamos Brad y yo esta manana cuando preguntaste que nos pasaba. Esta casado, con una mujer que vale mucho mas que el pero trata como si fuera una inutil descerebrada. Se comporto con Brad como si fuera un parasito que debia arrastrarse y lamer las miajas que se habian caido en sus brillantes zapatos. ?Era en serio? Kristine miro a su amiga con los ojos muy abiertos y estuvo a punto de que se le escurriera el largo vaso de entre los dedos aunque reacciono a tiempo y lo dejo sobre la mesa. --Vale, de acuerdo --acepto al final con un movimiento desinteresado de manos haciendo sonreir a Anabel--. No sirve. Tendremos que seguir buscando. --Deberias dejarlo, Kristy. Ya te he dicho que no quiero empezar ninguna relacion nueva por ahora. Kristine no insistio.
La expresion taciturna de su amiga hizo que guardara silencio. Hacia ya tres meses que Jonathan, su marido, se habia marchado y solo un mes que le habia enviado por correo los papeles del divorcio. Tampoco habian ido muy bien los dos anos de matrimonio, algo que no habia ayudado los dos abortos que habia sufrido Anabel y la exnovia de Jonathan, que no habia dejado de envenenar su oreja desde el inicio de su relacion y habia terminado consiguiendo que el volviera con ella y abandonara a Anabel. Kristine no habia visto a su amiga mas desolada que los primeros dias de la ruptura, cuando Jonathan se habia ido de la casa que compartian pero el optimismo de Anabel la habia llevado a seguir adelante y fingir que su vida no habia cambiado. Todos admiraban su fuerza de voluntad y hasta Kristine escuchaba los tipicos comentarios de no te merece, ya encontraras alguien mejor o el se lo pierde y, aunque Kristine opinaba igual, se habria mordido la lengua antes de hacer alguno de esos comentarios. Anabel no lo llevaba tan bien como aparentaba y mucho menos era tan fuerte. Siempre habia dependido de alguien y tras la muerte de sus padres se habia volcado en su relacion con Jonathan. Y ahora estaba sola. Kristine la habia descubierto algunas veces llorando y en los peores momentos habia confesado que lo echaba mucho de menos, que lo necesitaba y que no queria seguir viviendo sin el.
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entregame tu corazon